una mujer adulta tiene sus tetas folladas en la cama

Una mujer adulta se ha sentado en su cama, sintiendo un profundo deseo en su cuerpo. Sus tetas están en su punto álgido. Su cuerpo está pidiendo un toque, un roce, una noche de locura. Subió su falda lentamente hasta su cintura, desabrochando su sostén. Quería que alguien tocara la blanda carne de sus pechos. De pronto, sintió un par de manos bajo su piel, suave. Era un amante nocturno que sabía exactamente querer satisfacer sus deseos. Lentamente comenzó a acariciarla, besando sus tetas y lamiendo suavemente los pezones. Ella se sentía completa en sus manos. Ella gimió fuertemente, de placer y él lo notó. Su lengua traviesa recorrió sus pechos como si estuviera marcando un terreno suyo. Sus tetas estaban siendo folladas suavemente entre sus caricias y besos. La mujer adulta gustaba de la sensación, sintiéndose más cerca de la concreción de su placer. Había encontrado la mejor aventura de esta noche y no iba a soltarla tan pronto.