una dama rubia le da su coño a un hombre negro grande

Una dama rubia y un grande hombre negro, se encontraron en una noche oscura. Sus ojos se encontraron y él supo que era el elegido. Ella, aún en su vestido de fiesta, se acercó a él suavemente. Se movía con sutileza y dulzura, de manera que sus miradas ya se había fundido. Y entonces, él abrió sus brazos. Ella cayó suavemente, consciente de lo que ella había elegido. Se entregó a él por completo, como él lo hizo con ella. Tan pronto como sus labios se unieron, él estaba dentro de ella. Lentamente él entraba más profundamente, y los dos experimentaban el mejor momento de sus vidas. Ella temblaba de dulzura y él de satisfacción. Su cuerpo se encontraba como en un abrazo caliente. Era como si sus almas se habían unido para siempre. Al sentir el maravilloso momento, él se retiró. Se estaban mirando el uno al otro, la dama rubia le había dado su coño al hombre negro y él se había entregado completamente. Se habían unido en cuerpo y alma.