esposa madura ordeñando su coño peludo y culo

Cuando terminé de trabajar llegué a casa con muchas ganas de pasar algo de tiempo con mi esposa, mi madura y hermosa mujer. Entré al baño y allí ella se encontraba con la espalda apoyada a la bañera, su coño peludo y su culo a la vista. Yo me acerqué, deseando anhelante con mis labios, mis manos y mi cuerpo darle placer. Comencé ordeñando su coño peludo con las yemas de mis dedos mientras la besaba apasionadamente. Ella gemía de gusto mientras yo seguía ordeñando su coño y acariciando suavemente las nalgas. Así seguí durante mucho rato, ordeñando su coño, su culo, sus pechos y todo lo demás. Al llegar al clímax, ella exclamó: "mi esposo, mi amor...". Esta fue una de las mejores experiencias de mi vida, sin duda alguna, ya que gozar de la compañía de mi amada mientras la complazco resulta sensacional.