Señora mayor en medias y botas hasta los muslos tiene su culo jodido

Señora mayor, con medias y botas hasta los muslos, se sentaba sobre la mesa. Su culo jodido le hacía gritar de dolor cada vez que le tocaba. Su marido le acariciaba el culo y le decía entre risitas: "Qué culo tan jodido tienes, mi amor, no lo cambiaría por nada en el mundo.” La señora soltó un suspiro de placer y le dijo: "Pues entonces agárralo y empújalo para que me sienta completamente satisfecha". El la tomó y empujó suavemente contra la mesa con las manos, apretándola con todas sus fuerzas. La señora suspiró de satisfacción y gimió aliviada cuando finalmente su intimidad se curvó para acoger la sensual y suave presión de su marido.